Cinco de los siete integrantes del cuerpo votaron a favor del proceso. Uno se abstuvo y el restante faltó a la sesión. El jueves la intendenta deberá defenderse.
CAPILLA DEL MONTE - Por cinco votos a favor y una abstención, el Concejo Deliberante de Capilla del Monte aprobó ayer en una sesión extraordinaria el inicio de un juicio político contra la intendenta justicialista Rossana Olmos, a partir de una denuncia formulada por el concejal César Imbellone, del bloque Brigadier General San Martín.
A favor de comenzar el proceso que puede concluir con la destitución de la jefa comunal se inclinaron los ediles justicialistas Marcelo Rodríguez (actual presidente del cuerpo), Gabriela Castellá, Miguel Tagliani y Paola Díaz, y Gerardo Guerra, PJ.
Francisco Gramajo (UCR), que reemplazó a César Imbellone en esta sesión donde se trató su solicitud de juicio político, se abstuvo de votar a favor o en contra de la moción. En tanto, faltó con aviso el también radical Dante Carrizo.
Tras la aprobación del juicio político, el Concejo Deliberante decidió emplazar a Rossana Olmos para que el próximo jueves 9 de setiembre presente su defensa ante la denuncia de “corrupción administrativa” formulada por Imbellone, un dirigente estrechamente ligado al kirchnerista Eduardo Accastello.
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Imbellone fundamentó por escrito su acusación asegurando que “Olmos es responsable de haber contratado obras públicas por montos superiores a los autorizados por la legislación vigente, de pagar viáticos a agentes municipales que figuran como monotributistas y de gastar en la Muestra de Ciruelo 60 mil pesos pese a que el Concejo Deliberante no autorizó dicha erogación superior a la permitida legalmente”.
También el edil accastellista sostuvo que la intendenta no registró los aportes de distintos privados en la mencionada muestra.
Estos argumentos fueron considerados como válidos por cinco de los integrantes del cuerpo legislativo. Incluso Gramajo que en un anterior proceso de similares características contra la intendenta había votado en contra, en esta oportunidad cambió de postura y se inclinó por la abstención.
Tras conocer la decisión de la mayoría de los ediles, Rossana Olmos aseguró a distintos medios de prensa que “se trata de una maniobra política en su contra, un intento de golpe de Estado. Están más preocupados en destituirme que en dejarme gobernar Capilla del Monte”. Como única estrategia defensiva le queda a la jefa comunal la posibilidad de plantear la existencia de un conflicto de poderes con los ediles ante el Tribunal Superior de Justicia, tal como hizo el año pasado el intendente de Almafuerte, Daniel López.
Como única estrategia le queda a la jefa comunal la posibilidad de plantear la existencia de un conflicto de poderes con los ediles ante el TSJ.
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2015
